"Creo que siempre he sido buena con las palabras. En mi negocio es tan importante ser capaz de describir lo que hago, como hacer lo que hago. Qué sentir y la eleción de las palabras que decir. Algunos hombres odian oír alguna palabra, no pueden soportar ciertos movimientos, pero no pueden vivir sin otros. Es parte de mi trabajo saber donde poner mi mano, mis labios, mi lengua, mis piernas e incluso mis pensamientos. La presión aplicada, la duración y cuando debe parar. Me puedo convertir en tu primer beso o en un desplegable de Playboy que encontraste cuando tenias 9 años. ¿Soy tu secretaria o soy tu hija? O tal vez soy tu profesora de matematicas a la que odiabas. Todo lo que sé es que si lo hago bien me puedo convertir en tu sueño hecho realidad y entonces puedo desaparecer..."
Así empieza Chloe, un remake de una pelicula francesa llamada "Nathalie", que no he visto así que no las puedo comparar. La pelicula se centra en una mujer que sospecha que su marido le es infiel, por lo que contrata a una prostituta para que lo seduzca, pero como ocurre en este tipo de historias todo se complica y los sentimientos de Chloe (la prostituta) acaban cobrando protagonismo.
La pelicula me gustó más de lo que esperaba, pensé que iba a ver un telefilm barato de los que dan los domingos por la tarde en antena3 y me encontre con una pelicula que, pese a no parecerme una obra maestra me resultó entretenida, el planteamiento inicial es bueno, y la puesta en escena también, pero a medida que se desarrolla va dando giros que no me acabaron de convencer.
Puntuación: 6/10
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